Reseña Espacial Argentina

miércoles, 31 de octubre de 2018

CONAE aplaza lanzamiento del Tronador Tecnológico para 2021

CONAE APLAZA LANZAMIENTO DEL TRONADOR TECNOLÓGICO PARA 2021

Por Javier García, ArgentinaEnElEspacio

Perjudicada por los sucesivos recortes presupuestarios aplicados al área de Ciencia y Tecnología, la agencia espacial nacional reprograma para 2021 el vuelo de calificación del vector Tronador Tecnológico, inicialmente planificado para 2019.

Corte esquemático del Tronador III. 
Imagen: VENG S.A.
En agosto de 2015 durante la realización del seminario Ciencia, tecnología e Innovación, "Del Crecimiento al Desarrollo", el entonces Director Ejecutivo y Técnico de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), Dr. Conrado Varotto, revelaba al público presente los planes de la agencia espacial bajo su mando para desarrollar un vehículo lanzador denominado Tronador III. Sin embargo, desde aquel entonces, y coincidiendo con la llegada al gobierno de la alianza Cambiemos, el proyecto Tronador comenzó a experimentar dificultades presupuestarias cada vez mayores que provocaron su estancamiento.

El recorte presupuestario anunciado por el gobierno a comienzos de octubre para las áreas de Ciencia y Tecnología afectó directamente a la CONAE que sufrió una importante reducción de los fondos asignados a distintos programas. Proyectos que se contemplaban para incursionar en nuevas áreas de conocimiento, como por ejemplo la participación en instrumentación de misiones interplanetarias, debieron ser cancelados. Otros, que presentaban avanzado estado de desarrollo, como el programa ISCUL (dentro de cuyo marco se desarrolla el proyecto del lanzador Tronador en sus diferentes variantes), quedaron paralizados a la espera de una mayor inversión en Ciencia y Tecnología que de momento parece lejana en el tiempo.

Tronador III

El propio Conrado Varrotto reveló en 2015 que el Tronador III sería un vehículo de 2 etapas, 35 metros de altura, 2,5 mts de diámetro, y un peso de 89 toneladas al momento del despegue, con capacidad de inyectar una carga paga de hasta 1000 kg de peso en una órbita LEO (low earth orbit) entre 400 y 600 km de altura.

La primera etapa (también denominada etapa inferior) del vehículo está conformada por 4 motores de 30 tn de empuje cada uno, que totalizan un empuje total de 120 tn. Los motores de la misma utilizan Kerosene (KC1) como combustible y Oxígeno Líquido (LOX) como oxidante (tambien denominado comburente), con refrigeración de tipo regenerativa. Cada uno de estos motores de 30 tn de empuje consume 123 litros de combustible por segundo, que es impulsado dentro de la cámara de combustión mediante un sistema de turbo-bombas accionadas por medio de turbinas.

La empresa estatal YPF Tecnología (Y-TEC) fue la encargada de desarrollar el combustible (Kerosene de calidad espacial) que utilizan los motores de la etapa inferior del lanzador. El Tronador III cuenta en su interior con dos tanques de aluminio de estructura semimonocasco con capacidad de alojar los 34000 litros de combustible y 45000 de Oxígeno Líquido, los que al entrar en contacto producen el encendido de los motores de etapa inferior, generando la suficiente fuerza para elevar el vector hasta una altitud de 100 km en apenas 3 minutos, momento donde se pruduce el desprendimiento (separación) de la etapa inferior del resto del vehículo.

Segundos después de haberse desprendido la etapa inferior se produce el encendido del motor de la etapa superior, impulsada por un único motor de 3 toneladas de empuje. A diferencia de los motores de la primera etapa, éste único motor utiliza  Monometil Hidracina (MMH) como combustible y Tetraóxido de Dinitrógeno (NTO) como comburente, con un consumo cercano a los 8 litros por segundo. Su función es impulsar la carga útil (el satélite) más allá de los 400 km de altura para inyectarla finalmente en órbita.

La prueba de las turbo-bombas utilizadas por la etapa inferior del cohete esta supeditada a la construcción de un banco de ensayos en el Centro Espacial de Punta Indio (CEPI). Originalmente proyectada para el año en curso, la misma debió ser pospuesta a causa de la mencionada reducción presupuestaria. Similar suerte corrieron las facilidades auxiliares del Centro Espacial Manuel Belgrano, necesarias para poder realizar el lanzamiento del vector, cuya construcción también debió ser aplazada a causa de los recortes presupuestarios.

Próximos pasos

De no mediar nuevos recortes presupuestarios en el corto plazo, CONAE proyecta concluir durante el año próximo las obras de hormigón en el Centro Espacial Manuel Belgrano, ubicado en Coronel Rosales, provincia de Buenos Aires, como así también la construcción de una antena de 7,5 metros de diámetro el Tolhuin, Tierra del Fuego, en la estación de recepción satelital que CONAE posee en la isla, antena necesaria para efectuar el seguimiento de la última etapa de vuelo del Tronador y la puesta en órbita del satélite.

Una novedad relacionada al diseño del Tronador es que éste irá adquiriendo con el tiempo las características necesarias que a futuro permitan la recuperación y posterior reutilización de las etapas inferiores, con vistas a lograr una reposición periódica y de corto plazo de los segmentos de etapa inferior, como así también la utilización de tecnologías de construcción 3D para la fabricación de componentes de los motores.

2021

El lanzamiento de prueba de Tronador Tecnológico es vital para poder calificar todos los componentes del lanzador; estructura, subsistemas de propulsión, y aviónica, como así también toda la infraestructura auxiliar de tierra, de cara a su posterior empleo en los lanzadores de serie Tronador II y III. Lograda la calificación del Tronador Tecnológico, CONAE proyecta la construcción de los primeros 4 vehículos de serie para el lanzamiento y puesta en órbita de cargas satelitales. 

Siendo el sector espacial un formidable creador de valor (por cada dolar invertido en el área el retorno asociado es de 7 dólares), haber dejado de apostar al mismo ha sido un error que acarrea graves consecuencias, reflejadas hoy por ejemplo en el cierre de la empresa STI, compañía de carácter estratégico para el país, por haber tenido ésta una importante participación en el desarrollo local de la tecnología radar.

Ante la actual coyuntura de recesión, mal desempeño económico, y endeudamiento externo exorbitante, no es descabellado conjeturar que el año próximo se produzcan nuevos recortes presupuestarios sobre las áreas de Ciencia y Tecnología, provocando que las pruebas del Tronador Tecnológico planificadas para 2021 sufran un nuevo aplazo, quien sabe para cuando. 

Nuestros científicos, que en el plano del desarrollo espacial han tenido la capacidad de obtener logros relevantes, como realizar lanzamientos suborbitales de vehículos con seres vivos abordo (recuperándolos en perfecto estado de salud), diseñar y construir satélites geoestacionarios de comunicaciones y satélites con radar, hitos en manos de un reducido grupo de países, merecen mayor confianza y reconocimiento de parte de su gobierno, máxime en un país con demasiadas carencias como para darse el lujo de no invertir en Ciencia y Tecnología.

1 comentario:

  1. FELICITO A TODO EL EQUIPO DE TECNICOS Y CIENTIFICOS QUE ESTAN TRABAJANDO CON TODO SU ESFUERZO EN LLEVAR A LA ARGENTINA EN LOS PRIMEROS PUESTOS EN LA CARRERA ESPACIAL. SE MERECEN UN GRAN APLAUSO.

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