El proyecto CART (Chinese-Argentine Radio-Telescope) es un gigantezco radiotelescopio de 40 metros de diámetro, 60 de alto y 1300 toneladas de peso, que finalmente se instalará en
Chimbas, provincia de San Juan, en un predio perteneciente al Observatorio Astornómico Félix Aguilar, y que es el resultado de un convenio firmado entre la Universidad Nacional De San Juan y la Academia China de Ciencias.
El CART será una mole capaz de detectar ondas electromagnéticas y fotones provenientes de la profundidad del espacio cósmico, permitiendo escudriñar zonas del espacio poco y nada conocidas.
La gigantesca antena del CART permitirá detectar fotones de hasta 0,75 cm, y podrá operar en conjunto con una antena similar localizada en China; Al apuntar ambas en simultaneo a la misma fuente de emisión y coordinando sus señales de entrada, podrán considerarse partes componentes de un único radiotelescopio de diámetro kilométrico (configuración conocida como Very Long Baseline Interferometry o VLBI), con una capacidad de resolución abrumadora.
Según informó la UNSJ recientemente el CART “contará con un sistema de localización posicional milimétrico, y con un reloj (un máser de hidrógeno) cuyo error es a lo sumo de un segundo cada diez millones de años. Si hubiésemos usado ese reloj desde la época de los dinosaurios hasta la fecha, solo se atrasaría o adelantaría en ¡apenas siete segundos!”
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| Radiotelescopio de Miyun, China, análogo del Proyecto CART. |
El CART será una mole capaz de detectar ondas electromagnéticas y fotones provenientes de la profundidad del espacio cósmico, permitiendo escudriñar zonas del espacio poco y nada conocidas.
La gigantesca antena del CART permitirá detectar fotones de hasta 0,75 cm, y podrá operar en conjunto con una antena similar localizada en China; Al apuntar ambas en simultaneo a la misma fuente de emisión y coordinando sus señales de entrada, podrán considerarse partes componentes de un único radiotelescopio de diámetro kilométrico (configuración conocida como Very Long Baseline Interferometry o VLBI), con una capacidad de resolución abrumadora.
Según informó la UNSJ recientemente el CART “contará con un sistema de localización posicional milimétrico, y con un reloj (un máser de hidrógeno) cuyo error es a lo sumo de un segundo cada diez millones de años. Si hubiésemos usado ese reloj desde la época de los dinosaurios hasta la fecha, solo se atrasaría o adelantaría en ¡apenas siete segundos!”
La antena del CART, que será aportada por la Academia China
de Ciencias, está siendo actualmente construida en el país asiático y se estima que llegaría a fin de
este año al país. Solamente la antena tiene un costo de 15 millones de dólares. La Universidad Nacional de San Juan por su parte se encargará de financiar el emplazamiento, el transporte, la instalación y los posteriores
equipamientos, que rondarían los 7 millones de la misma moneda.
El disco del CART será con forma de plato lleno (no será una
estructura reticular), porque los fotones que va a recibir llegan a ser extremadamente
diminutos, del orden de medio metro a unos pocos milímetros (estos últimos no podrían ser
detectados con un antena reticular sin plata continuo).
Según informaron autoridades de la UNSJ, “Es una antena de
radio muy sofisticada. Puede captar emisiones que permiten identificar fuentes
astronómicas de ondas de radio, como pueden ser quásares, núcleos galácticos activos, nubes orgánicas, y
diversos tipos de materias que desde el espacio emiten señales
electromagnéticas” .
También permitirá efectuar comunicaciones con naves espaciales y se espera que esté en pleno funcionamiento durante el 2015.
El proyecto CART podrá integrarse a las redes geodésicas internacionales existentes, posicionando al observatorio de San Juan como una de las pocas estaciones “Co-localizadas” en el mundo que disponen de un telescopio Laser Satelital, una estación GPS y un radiotelescopio.
También permitirá efectuar comunicaciones con naves espaciales y se espera que esté en pleno funcionamiento durante el 2015.
El proyecto CART podrá integrarse a las redes geodésicas internacionales existentes, posicionando al observatorio de San Juan como una de las pocas estaciones “Co-localizadas” en el mundo que disponen de un telescopio Laser Satelital, una estación GPS y un radiotelescopio.
“Hasta ahora existen sólo dos estaciones de estas
características en el hemisferio sur, en Sudáfrica y en Australia, y ahora
habrá una en Argentina”, según destacó
el Lic. Claudio Mallamaci.
Este convenio signado entre Argentina y China significa para nuestros investigadores el poder contar con instalaciones que les permitirán realizar sus trabajos de investigación en condiciones técnicas de paridad semejantes a las de sus colegas de las naciones centrales, y refleja por otro lado, la visón estratégica y el buen uso de los recursos financieros con que se está gestionando la ciencia en nuestro país.
Este convenio signado entre Argentina y China significa para nuestros investigadores el poder contar con instalaciones que les permitirán realizar sus trabajos de investigación en condiciones técnicas de paridad semejantes a las de sus colegas de las naciones centrales, y refleja por otro lado, la visón estratégica y el buen uso de los recursos financieros con que se está gestionando la ciencia en nuestro país.
Por último, este convenio viene
a desmitificar un mito bastante reciente del folklore nacional; Aunque la vecina del barrio siga pensando que
los chinos en nuestro país "solo se dedican a abrir supermercados", la realidad
subyacente es bien distinta.
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